La mujer que prospera es el consejo infalible y milenario de la madre del rey Lemuel, aplicado a las mujeres del siglo 21. Ayuda a alcanzar la prosperidad integral al enfocarse en cinco áreas críticas de la vida de la mujer: la relación de pareja, el desarrollo de las habilidades personales, el carácter generoso, el legado que deja a sus hijos y la relación íntima con Dios.