Al dedicar una o dos horas a la semana, muchos cristianos descansan el resto descuidando la iglesia y sus necesidades. Joshua Harris llama a los cristianos a ponerle fin al juego y comprometerse, como Cristo se comprometió con nosotros, su novia. Explora, además, las ramificaciones de Efesios 5:25-32, lo cual proclama la intensidad y la anchura del amor de Jesucristo por su iglesia.